Muy buenos días les saluda el pastor Oscar Cárdenas en este hermoso sabado de fin de semana con un clima espectacular pues el calor ya ha bajado y mi deseo para ti es que tu día te permita el descanso y esté lleno de amor y convivencia y que dentro de tus multiples actividades pongas como tu prioridad a Dios, para que recibas sus grandes bendiciones, y te prepares para que con gozo te congregues mañana cumpliendo la cita que tienes con Dios, y ahora iniciemos con lo importante oyendo la voz de Dios y recibiendo su consejo para nuestra vida.
Isaías 14 comienza con una promesa de restauración para Israel y una burla profética contra el rey de Babilonia. Aquí, Dios asegura que tendrá compasión de Jacob y que elegirá nuevamente a Israel, liberandolos del exilio y regresandolos a casa. El pasaje nos enseña sobre la misericordia y la justicia de Dios, quien no solo juzga a las naciones arrogantes, sino que también promete restaurar y bendecir a su pueblo. Es un recordatorio de que Dios no olvida a sus hijos y que tiene un plan de restauración para ellos, incluso en medio del dominio de Babilonia.
Isaías 15 presenta una profecía sobre Moab, describiendo la desolación y el lamento que caerán sobre esta nación. La tristeza y el duelo llenarán las ciudades y campos de Moab debido al juicio de Dios. Y nos muestra las consecuencias del pecado y la idolatría, que los lleva a la destrucción y al dolor. Nos enseña sobre la seriedad del juicio de Dios y la necesidad de arrepentimiento para estar en comunión con él.
Isaías 16 continúa con la profecía sobre Moab, llamando a la nación a buscar refugio en Judá y a rendir homenaje al trono de David. Sin embargo, Moab sigue en su orgullo y arrogancia, lo que finalmente los lleva a su ruina. Este capítulo nos enseña sobre la importancia de la humildad y la dependencia de Dios. Nos recuerda que el orgullo y la autosuficiencia alejan a las personas de la protección y la bendición de Dios, mientras que la humildad y el reconocimiento de nuestra necesidad de Él nos acercan a su gracia y misericordia.
Que estas enseñanzas nos lleven a confiar en la promesa de restauración de Dios, a tomar en serio su juicio y a vivir con humildad, buscando siempre su refugio y su guía en nuestras vidas. Que tengas un bendecido fin de semana.
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